Reglas mnemotécnicas: ¿qué son y cuáles son las más utilizadas?

Seguramente, más de una vez, habrás utilizado tus conocimientos para relacionarlo a una idea o, aprendizaje nuevo, difícil de recordar. Por ejemplo, cuando eras niño, si te costaba recordar la forma de la “E” mayúscula en cursiva, te han dicho que te imagines un 3 al revés. A todo esto, se le tiene un nombre y, se trata de las reglas mnemotécnicas, aunque suena complicado, en realidad, su entendimiento es sencillo.

Conocer sobre estos métodos, sus aplicaciones y cuáles pueden ser las mejores maneras de usarlas, puede ayudarte a mejorar tus técnicas de aprendizaje de manera increíble. Por eso, a continuación, te mostramos de qué tratan y diversos aspectos de las mismas, necesarios para poder llevarlas a cabo.

¿Qué son las reglas mnemotécnicas?

Se trata de la selección de palabras o imágenes previamente aprendidas, capaces de relacionarse con un conocimiento nuevo, para de esta manera facilitar su aprendizaje, si el mismo ha sido dificultoso. Aunque existen muchas reglas de este tipo y métodos para establecerlas, en realidad, queda a creatividad de cada quién el cómo las emplea.

Desde unas tan generales como “A” (concepto nuevo) de “Avión” (concepto viejo), hasta otras personalizadas de cada quien e, incluso, utilizadas durante una sola ocasión, como el hecho de colocar las llaves junto al dispositivo celular antes de salir para no olvidarlas dentro de casa.

Qué tipo de contenido puede aprenderse y, a qué tipo de conocimiento previo puede relacionarse, es una decisión única de cada quien, hasta los momentos no hay límites establecidos al respecto. Basta con asociar un conocimiento viejo, para aprender uno nuevo, para considerarse una mnemotecnia que, por lo general, se trata de palabras únicas, imágenes u oraciones muy cortas.

¿Cuáles son las técnicas mnemotécnicas más empleadas?

En la sección anterior te hablamos, en otras palabras, de que no es necesario seguir ningún instructivo para poder usar reglas mnemotécnicas. Sin embargo, existen una serie de técnicas utilizadas para establecerlas y aunque son muchas, a continuación, te mostramos las más resaltantes.

Iniciales

Es uno de los métodos más usados cuando es necesario aprender varias palabras no vinculadas en una sola frase. En él, se toman las iniciales de cada una de las palabras a aprender y, con ellas, se forma una palabra nueva. Así, cuando la persona recuerda la palabra nueva conformada por las iniciales, puede recordar el significado de cada una de las letras.

Recuerdos

Es una de las técnicas favoritas de la mnemotecnia cuando de utilizar palabras o, experiencias ya vividas, se trata. Es decir, a una palabra nueva difícil de recordar, se le atribuye una vivencia asociada a ella.

Para hacerlo más específico, te mostramos un ejemplo: si debieras recordar el nombre de una nueva conocida llamada Sol, pero por alguna razón, te cuesta aprenderlo, puedes empezar a asociarla a un día de mucho sol en la playa. Así, no estarías relacionando su nombre con el sol mismo, porque ese sería otro de los métodos mnemotécnicos, sino, estarías acordando su nombre con la sensación del sol en tu piel.

Palabra u oración

En esta oportunidad, se utiliza una técnica similar a la primera mencionada en esta sección, pero, esta vez, no deben utilizarse necesariamente solo las iniciales de cada palabra, sino, pueden elegirse a gusto una o más letras o sílabas de cada una de las palabras, hasta encontrar una palabra inventada con la que el usuario se sienta lo suficientemente cómodo.

Si entre todas las sílabas o letras, se lograra conformar una palabra previamente existente, sería igualmente válido como reglas mnemotécnicas, sin embargo, es poco probable. Por eso, lo ideal, es no esforzarse ubicar una palabra ya creada, basada en las sílabas o letras de las palabras, sino, destinar energías en el aprendizaje de una palabra nueva, lo suficientemente curiosa, como para hacer memorizada.

Palabras existentes

En esta técnica, se utilizan palabras ya existentes para asociarlas a otras nuevas de difícil aprendizaje, las palabras pueden basarse en una experiencia personal o, simplemente, en la semejanza de la nueva con una ya conocida. Así, probablemente, al conocer la necesidad de recordar la palabra nueva, recurra a la vieja con similitud, y de esta forma, la nueva llegará por sí sola.

Aunque suena un poco absurdo, en realidad, no es mala idea. Por ejemplo, si deberíamos recordar la palabra “Otorrino” y el problema no es saberla, sino recordarla, podríamos asociar con una palabra ya conocida y ligeramente conocida como “Ornitorrinco”.

Visualización

Por esta vez, no usaremos palabras u oraciones, sino, imágenes. Es decir, a la frase o palabra nueva a aprender, o elemento a recordar, se le relacionan con imágenes ya existentes o planeadas en el momento. Uno de los ejemplos más usado para este tipo de mnemotécnicas, consiste en cerrar los puños y, con los nudillos y los espacios entre ellos, identificar los meses del año terminados en 30 y los demás en 31.

Conoce los ejemplos reglas mnemotécnicas más comunes

Ya hemos visto las técnicas más empleadas. Aun así, existen muchas otras reglas mnemotécnicas, a continuación, mostraremos ejemplos utilizados de manera muy general para conceptos de aprendizaje muy solicitados.

Por ejemplo, los más clásicos, visto desde niños, consiste en el aprendizaje de las vocales y demás consonantes del alfabeto, con la utilización de imágenes y nombres relacionados con cada una. “E” de “Elefante”, “J” de “Jirafa”, “Z” de “Zapato”, etc.

Para los estudiantes de psicología, aprenden la palabra “EVoCaCión” como la manera de hacer memoria sobre las 4 principales alteraciones del pensamiento, distribuidas en Estructura, Velocidad, Contenido y Control.

Mientras tanto, solemos realizar una más común: Recordar los números largos como las cuentas bancarias o tarjetas de crédito, no por cada uno de los números, sino por grupos más grandes. En vez de “1, 2 y 3” tendríamos “123”.

Básicamente, las reglas mnemotécnicas es lo que la mayor parte de las personas, suele emplear cuando intentan aprenderse algo nuevo que resulta un poco complicado, de esta manera, al intentar recordar lo complicado, la asociación con algo ya conocido te haría recordarlo. Seguramente, en muchos momentos los habidas llevado a cabo, pero, aún no sabías su nombre, espero haber aclarado tus dudas, si lo que buscas es asesoramiento en tus trabajos escolares, ¡contáctanos!